Tipos de manijas y jaladeras

Dentro de los tipos de herrajes, tenemos a las manijas, pomos, perillas o jaladeras, que son los mecanismos que sirven para abrir puertas y cajones en materiales como latón, bronce, aluminio, etc.

Aunque puedan parecer elementos simples y sin importancia, las jaladeras visten y destacan mucho más de lo que parece a un mueble o a una puerta. Una mala decisión en la elección de estos herrajes puede tener dos problemas: el estético, con el que se tendrá que convivir en un lugar que no termina de convencernos y que no va con la decoración del espacio; y el funcional, donde la pieza elegida no permita abrir el mueble con eficiencia y comodidad. Además de elegir el material más elegante o sofisticado, nos debemos plantear qué desgaste tendrán, el tiempo que durarán, si hay posibilidad de que se rallen o se rompan, o si se mancharán y quedarán huellas con facilidad; además de los productos con los que debemos dar limpieza y mantenimiento.

 Las elecciones correctas de los herrajes, mejorarán el impacto visual del edificio; su funcionalidad, accesibilidad, seguridad y longevidad.

Tipo asa. La gama de jaladeras de asa proporcionan gran variedad de formas y modelos. Son las que se utilizan en muebles y cocinas con un diseño más tradicional. Las más comunes suelen ser rectas y de tamaño medio, pero las opciones se multiplican a la combinación de madera con metal, latón con porcelana, etcétera

De pomo o botón. Se encuentran entre las opciones más clásicas. Se pusieron de moda en los años ochenta y la variedad es casi infinita, depende mucho la imaginación de los diseñadores industriales que anualmente lanzan una multitud de colecciones de herrajes, algunos de ellos verdaderamente imaginativos

De zamak. Éste quizás sea el material más utilizado para la fabricación de manijas, ofrece una versatilidad similar al acero, es un material duro, resistente y difícil de rallar resultante de una aleación de metales como zinc, cobre, aluminio y magnesio.

Cajón con uñero. La jaladera tipo uñero, va embutida en el canto de la puerta o mueble o, en el frente. El sistema tiene una pequeña “uña” o hueco que facilita el mecanismo para tirar a través de él. Se fija en un espacio suficiente sin ninguna modificación de los cantos. Esta es la tendencia del diseño minimalista por excelencia.

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