Seagram Building la materialización de la arquitectura moderna

Publicado en: Noticias | 29 noviembre, 2022

La magna arquitectura del Seagram Building es considerado un referente importante sobre la arquitectura moderna 

Sus 39 pisos y 157 metros de altura establecieron un estándar para los rascacielos modernos. “Durante la mayor parte del último milenio, el péndulo del gusto en la arquitectura occidental se ha debatido entre dos polos estéticos: el gótico y el clásico. Debido a que fusiona elementos de ambos extremos en un todo de suprema elegancia, elijo al edificio Seagram como la edificación más importante del milenio”. Así, de golpe y porrazo, Herbert Muschamp –influyente columnista arquitectónico del New York Times–, consideró en 1999 que el edificio Seagram estaba a la misma altura que el Taj Mahal, la Ópera de Sydney o cualquier catedral gótica.

Aunque la afirmación suena descabellada en primera instancia, la arquitectura y concepto de este gigante neoyorquino hablan por sí mismos.

LA ILUSIÓN DE LA DESESPERANZA

A mediados del siglo XX, la ciudad de Nueva York era un hervidero de ideas. En plena posguerra y tras el arribo de miles de europeos que huían de la Segunda Guerra Mundial, la urbe recibió y se benefició con el talento e ideas llegadas del otro lado del Atlántico. El conocimiento de los migrantes se extendió a todas las áreas y la arquitectura no fue la excepción.

Ludwing Mies van der Rohe fue uno de esos migrantes que llegó para quedarse en EU, nacionalizarse estadounidense y dejar un legado universal en su nueva patria.

Nacido en Aachen, Alemania, en 1887, Mies llegó a EU en 1937. Para ese entonces, ya era un arquitecto consagrado internacionalmente. Obras que se volvieron clásicos lo confirman, como el Pabellón de Alemania que el gobierno de su país le comisionó para la Exposición Internacional de Barcelona de 1929. Además, en 1930 había sido nombrado director de la Bauhaus, importante escuela alemana de arquitectura, diseño y arte.

Entre los ataques nazis del exterior y las revueltas estudiantiles del interior, la escuela estaba en estado permanente de turbulencia.

Finalmente, los nazis cerraron la escuela en 1933 y, aunque trató de continuar con ella en Berlín, Mies anunció el fin de la Bauhaus ese mismo año. El diseño moderno era una causa sin esperanza en el estado totalitario de Hitler.

¡Busca más novedades y productos en nuestra edición de noviembre!