Piedra como aislante térmico

Calidez en el contraste

Las diferentes sensaciones que evocan los recubrimientos llegan a modificar los espacios. La calidez de la madera y el frío de la piedra se conjugan aquí, en un entorno tan atractivo como confortable. Para armonizar un ambiente pueden utilizarse diferentes estrategias, tales como la combinación de muebles, el equilibrio entre luz y sombra, o incluso el balance entre distintos recubrimientos. El tercer aspecto se utiliza en el espacio que ilustramos. No sólo se contrasta entre las texturas de los revestimientos, sino que también se provocan sensaciones complementarias en el conjunto.

La piedra, por su cualidad de aislante térmico, emana frescura, mientras que la madera transmite el calor.

Los otros elementos del conjunto buscan influir lo menos posible en este duelo de revestimientos. Los muebles utilizan un estilo minimalista, y destacan por su reducido tamaño y la sutileza de las formas. Asimismo, el techo y el suelo son elementos discretos y uniformes que buscan ceder el protagonismo al contraste armónico de los recubrimientos.

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