Muros texturizados

Este recurso ha ganado la preferencia de muchos diseñadores porque dan movimiento y textura con el relieve de líneas, cuadrados, ondas, etcétera.

El acabado con textura puede ser utilizado en la mayor parte de una habitación si lo que se busca es algo sin tanto diseño y que pueda combinar muy bien con cualquier otro tipo de textura o material. Se recomienda el color blanco para dar contraste a los demás elementos de la habitación. También se pueden crear simulaciones tanto en exteriores como interiores. Por ejemplo: con simulaciones de rocas, madera, piedrines, por mencionar algunos. Estas van muy bien con las fachadas en bardas perimetrales, en asadores y en terrazas. En interiores pueden ser utilizados en recámaras, escaleras y, por qué no, en una sala.

Es importante aplicar la textura en un muro principal que será el protagónico, nunca en muros secundarios.

Las pastas texturizadas son una práctica opción para realizar mejoras decorativas, son materiales de gran durabilidad, resistencia y lavabilidad. El volumen adicional que se logra obtener con los texturizados en muros y plafones permite, además aumentar la resistencia térmica y la disminución de ruidos, a la ves que otorgan ese bello y original toque decorativo. Las pastas logran dar el acabado final a los muros sin necesidad de utilizar pintura y pueden emplearse tanto en interiores como en exteriores. Este tipo de acabados ayudarán a darle tranquilidad y calidad a tus espacios.

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