Ladrillo desnudo
La expresividad de este material es latente en el diseño moderno
Si bien su uso sin recubrimiento recuerda tiempos de antaño, hoy se puede usar con éxito en espacios de gran frescura y diseño. El ladrillo desnudo expresa el vigor del mundo de la construcción. Los revestimientos aminoran esa sensación, que, no obstante, puede llegar a ser útil en el diseño de ciertos espacios.
El conjunto que se ve en la ilustración incorpora esas características y busca un entorno confortable. El contraste entre la luz de un lado del cuarto y la oscuridad del muro se combinan en este espacio peculiar. Los elementos juegan un papel clave: la luz artificial, la plataforma que adquiere más juego de color conforme se aleja del muro, la abundancia de líneas rectas, el color oscuro de las losetas e incluso la planta que aporta vitalidad al rincón menos iluminado. Gracias a estos elementos, la desnudez del muro no inquieta, sino que vuelve acogedor el espacio y evoca comodidad.