El arte de la luz: iluminación exterior
La percepción nocturna de un edificio se favorece con la combinación de luces y sombras, creada a partir del diseño de iluminación.
Durante la noche, la vida de las grandes ciudades no termina. La iluminación de fachadas, monumentos o estructuras brinda seguridad, facilita la orientación y contribuye a la creación de un paisaje urbano atractivo. Un edificio iluminado de manera apropiada no sólo resalta sus características arquitectónicas, también representa un mérito profesional que incrementa el valor tanto estético como económico del inmueble.
A través de ella, se pueden evocar distintas emociones o sensaciones, por lo cual, el diseño de iluminación resulta una tarea casi artística. Además de una gran sensibilidad artística, sabemos que para iluminar un espacio es fundamental contar con una formación sólida; conocer las técnicas existentes e identificar los productos que ofrece el mercado, desde iluminarias tradicionales hasta focos controlados por wi-fi.
Además de dar visibilidad a las zonas que más nos interesa resaltar, ya sea por funcionalidad o seguridad, la iluminación exterior crea texturas y escenas decorativas, atrapando el interés de los usuarios o visitantes a un inmueble. La iluminación exterior en el ámbito doméstico, incluye la iluminación de fachadas, pasillos, corredores, jardines, terrazas, balcones, caminos o áreas recreativas; todas ellas con un requerimiento de potencia, temperatura de color y estética.
Ciertas investigaciones establecen que el sistema de iluminación exterior puede afectar percepciones de claridad visual, amplitud y agrado. Estos aspectos ocurren en espacios que están uniformemente iluminados, con énfasis en iluminaciones más altas en las superficies. Los diseños de las luminarias exteriores son tan amplios, como la diversidad de gustos, estilos y costumbres de los miles de usuarios en cientos de ciudades por todo el mundo, encontrando productos con diseños clásicos y tradicionales, así como los más modernos y sofisticados. Además de los abundantes diseños, los acabados metálicos van de los plateados tradicionales, cromados, hasta los bellos dorados, pasando por una amplia gama de grises, negros y recientemente colores vibrantes. Así se puede escoger el que mejor corresponda con el estilo decorativo que se necesita.
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