Diseñando el baño: cabinas

Las cabinas de baño surgen de la necesidad de satisfacer los gustos y el uso de cada usuario, por lo que cada vez se tornan más funcionales, inteligentes y, claro, estéticas.

Por lo regular, son elaboradas con vidrio templado, por lo que aplican los tres espesores disponibles para las mamparas de ducha; aunque pueden encontrarse en otros materiales, como los plásticos de ingeniería.

Sea cual sea el caso, cuentan con accesorios de acero inoxidable y los paneles de vidrio pueden personalizarse con la impresión de alguna imagen deseada, además de poder integrar dispositivos para escuchar música, sistemas de hidromasaje, conexión para el celular, entre otras alternativas. La ventaja más llamativa de instalar una cabina de baño es la reducción del consumo de agua, pues dentro de la cabina hay menor retención y vienen acompañadas con tecnología que aplica varios sistemas para ahorrar agua, pero manteniendo la calidad del suministro, ya sea en la ducha principal o de gran formato, o en la ducha de mano.

Al día, una familia promedio de cuatro miembros consume aproximadamente 150 litros de agua por persona. El 40 % del gasto es reflejado en el consumo de agua en el inodoro, el 35 % en la ducha y el 25 % restante en los otros suministros.

Por otro lado, en un baño pequeño permite aprovechar al máximo el espacio, pero requiere de un mantenimiento constante, para eliminar las marcas de agua o de grasa en los paneles de vidrio, a menos que se opte por un vidrio no transparente. Para realizar una correcta elección, primero es importante conocer la superficie que será destinada para la ducha, lo cual determinará el cierre o apertura que tendrá y el tipo de cabina:

• Cabina angular: es curva y está diseñada para encajar en una esquina del baño; ideal para aprovechar el espacio disponible, en especial en baños pequeños; suele medir 76, 80 ó 90 cm, y cuenta con dos puertas corredizas que se abren desde la esquina exterior.
• Cabina cuadrada: diseñada para colocarse en una es – quina; cuenta con el frente curvado para aprovechar el espacio mínimo del suelo; tiene una o dos puertas corredizas o plegables, y está disponible para el lado derecho o izquierdo (es decir que un lado es más largo que el otro).
• Cabina de hidromasaje: combina el lujo de una ducha de vapor con una ducha de hidroterapia; se moldea en acrílico y se fabrica en una sola pieza; se compone de una ducha de hidromasaje y chorros corporales, además de una ducha con vapor si se desea, y puede llevar asientos, espejos y luces, o altavoces Bluetooth.

La instalación de una cabina de ducha debe realizarse por un profesional para asegurarse de un correcto funcionamiento. A pesar de su tamaño, instalar una cabina garantiza personalidad a todo el ambiente, ya que por su diseño se convierte en protagonista del cuarto de baño.

Por lo anterior, se pueden elegir entre perfiles y grifería en color cromo, blanco o negro, dependiendo el estilo de la decoración, por ejemplo, las líneas rectas de una cabina cuadrada corresponden al minimalismo y los perfiles en tono negro aportan elegancia y glamour.

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