Casa Zatarain, lenguaje armónico

Publicado en: | 8 julio, 2019

Armoniosa distribución con un reducido número de materiales.       

37

En esta edición de Mejores Acabados, pudimos charlar con el arquitecto Mauricio Alonso, quien amablemente respondió preguntas de distinta índole y con toda franqueza. De ahí que esta entrevista tenga un toque íntimo, tal como la Casa Zatarain, principal punto de nuestra interesante charla.

Mauricio Alonso lleva veinte años ejerciendo la arquitectura. Ha trabajado en proyectos de diferentes magnitudes, pero siempre con la idea de mantenerse fresco en propuestas y en el diseño de las mismas. Su despacho, “m arquitecturA”, ha sido reconocido por su gran profesionalismo, pero, sobre todo, por la innovación en sus proyectos. San Miguel Allende es el sitio donde gran parte de estas obras se han realizado, y las construcciones destacan por su estética y su diseño.

25

“Generar proyectos tomando al toro por los cuernos”

La filosofía del arquitecto Alonso es simple y puede resumirse en algunas frases: “La maestría en arquitectura de interiores me ayudó a retomar ese espacio de juego que yo tenía en los proyectos de la universidad, pero aplicado a la vida real. Eso es lo que me ha mantenido siempre fresco en las propuestas. Además, me parece que la empatía con los clientes es fundamental. Siempre termino de amigo con mis clientes, porque eso beneficia el trabajo y la toma de decisiones”.

Sin embargo, más allá de los conceptos y de la manera de trabajar, existe una ideología que ha ayudado a mantener la calidad y el valor en las diferentes edificaciones: “La filosofía es generar proyectos tomando al toro por los cuernos”, dice disculpándose por el lugar común. “Cuando el proyecto es pequeño, tenemos que pensar en grande, pensar que tiene grandes magnitudes y repercusiones. En cambio, cuando es un proyecto grande, hay que imaginar que es uno pequeño, para no achicarnos.”

24-1

Este enfoque peculiar aplica a la Casa Zatarain, ubicada dentro de un fraccionamiento privado, lejos de la zona urbana de San Miguel Allende. La obra se realizó para una familia joven, por lo que parecería un proyecto de pequeñas dimensiones; sin embargo, ese enfoque del que habla el arquitecto se aplicó en esta construcción, la cual, sin duda, presenta innovación y grandes magnitudes en su estilo.

El proyecto se realizó en un terreno de una plataforma plana con orientación norte-sur. En paralelo y alineada a la calle de acceso, la fachada principal mantiene un lenguaje armónico con el interior y con el exterior. En realidad, esta obra luce su innovación en todos sus rincones.

6

A pesar de su elegancia y diseño, el proyecto rebasó los tiempos estimados, no tanto por la complejidad de la realización, sino por otras circunstancias: “Yo le había dicho diez meses al cliente, pero me parece que nos fuimos a doce meses. Es un tema muy recurrente aquí en San Miguel: tienes un equipo de trabajadores, pero hay veces que llega una gran obra a San Miguel y se empiezan a desbalagar los trabajadores, porque les dan más dinero en otros lados. Entonces, en lo que llegas a un acuerdo con otras personas, se retrasa el proceso. No fue tanto el modificar planos ni modificar nada. El proyecto gustó desde el principio”. En ese sentido, la ventaja de esta construcción fue el diálogo constante y la búsqueda de la empatía que el arquitecto tiene como concepto de trabajo.

42

¿Cuál es la relación con tus clientes, para escuchar sus propuestas y después proponer un proyecto que tenga en cuenta el contexto, el espacio, la obra, el presupuesto? ¿Cómo se da esa negociación de ideas?
El proceso es bien distinto con cada cliente. Eduardo, amigo mío, venía con otra propuesta para sus terrenos [la Casa Zatarain]; me llegó con algunas imágenes. Al final, a partir de conversaciones y considerando las necesidades del cliente, entendí las texturas que quería. Además, Eduardo me enseñó fotos de su casa, y me habló de su casa anterior, de lo que le gustaba y de lo que no le gusta, y con ello pude darme una idea para visualizar este proyecto.

20

La obra
Los materiales en este proyecto no fueron muchos; de hecho, el estilo del arquitecto es que no pasen de tres en sus construcciones. Además del concreto, se emplearon la piedra volcánica negra y la cantera gris Querétaro, usada en todos los pisos de la casa. Asimismo, la carpintería hecha en sitio brinda una calidez visual que se puede apreciar a simple vista.

Captura de pantalla 2019-07-08 a la(s) 16.11.32

Sin embargo, el uso de estos materiales, como comentaba el propio arquitecto, se ha ido expandiendo en los últimos años; por ello, quisimos saber qué diferenciaba esta obra de las demás que usan estos mismos elementos: “Este proyecto tiene una gran fuerza, principalmente por la crujía central girada. De entrada, eso la diferencia incluso de mis propios proyectos. Tengo algunos otros con crujías giradas, pero no se había visto en la organización, o más bien, en la distribución de los espacios”.

35

En general, esta obra se realizó con fluidez y sin complicaciones técnicas que enredaran la parte creativa: “Por fortuna, no me tocaron tantas dificultades técnicas en este proyecto. Honestamente, no tuvimos ese problema en específico. Hay algunos otros donde instalo diferentes sistemas y surgen complicaciones. En teoría, ésta es una casa de descanso, de fin de semana. Entonces, Eduardo no quiso invertir tanto en la automatización de los espacios. En realidad, fue una instalación muy convencional de energía eléctrica, hidráulica y sanitaria. La alberca fue lo que más tuvo temas de ingeniería, pero se resolvieron fácilmente. También instalamos paneles solares en el techo y una bodega”.

Te invitamos a disfrutar el articulo completo en nuestra edición de julio.

WhatsApp Image 2019-07-01 at 1.05.45 PM