Casa Bautista: ascenso orgánico y calidez material

Publicado en: Noticias | 28 septiembre, 2021

Aunque la belleza en conjunto de Casa Bautista es contundente, hay ciertos espacios que hacen la diferencia.

Cualquiera que visite el sitio, será bienvenido por unas cruces estructurales de concreto azul que harán que la primera impresión al conocer Casa Bautista sea inolvidable. Otros elementos que definen a la perfección la personalidad de la casa, son el patio con su escalera de caracol, el espacio que se encuentra completamente abierto a la selva y, por supuesto, la alberca en el techo.

Acerca de la escalera, ese elemento que distingue a leguas al proyecto y que pareciera estar “ensamblado”, como viniendo de otro contexto, Víctor nos cuenta más detalles: “Siempre hemos pensado en los contrastes. En este caso, son las curvas de la escalera y el estudio lo que rompe con la ortogonalidad, las líneas rectas y todo aquello que se encuentra en un ángulo de 90 grados. El paisaje también forma parte importante, en un recorrido fluido que da vueltas uno va descubriendo poco a poco las diferentes vistas alrededor de la selva. Esto continúa hasta que uno descubre el mar, la laguna y el cielo sobre la selva”.

Otro elemento arquitectónico de Casa Bautista que acentúa esa sensación de diálogo entre el proyecto y su entorno, son los materiales utilizados.

Además, la forma de combinarlos parece haber sido toda una intención desde el inicio. Víctor nos lo aclara: “Básicamente, predominan dos materiales. Hoy en día, la tecnología del concreto permite no sólo resolver la estructura de la construcción, si no que, con el uso de pigmentos azules, agregados de color blanco y el diseño de la cimbra, se obtienen los acabados de toda la casa. La madera es otro material importante que, gracias a los pergolados, los decks y las puertas plegables, terminaron dando el toque cálido que buscábamos”.

Precisamente por eso, por la novedad de los materiales y las nuevas generaciones de concretos y maderas, le preguntamos a Víctor por las expectativas en cuanto al mantenimiento de los materiales usados. “Por tratarse de una casa frente al mar y en medio de la selva, buscamos materiales duros, de bajo mantenimiento y de digno envejecimiento. Sin embargo, siempre es necesario tratar la madera con ceras naturales por lo menos una vez al año. Al estar en una península tan expuesta, parte fundamental del diseño fue incorporar decks y pergolados de madera, plegados con un sistema de bisagras sobre las fachadas, para cerrar completamente los espacios y protegerlos en caso de tormentas. El concreto, aunque no necesita atenciones especiales específicas, nos dio una grata sorpresa, pues el pigmento ha ido mutando desde un azul cobalto en la base, hasta un color rosado en la zona de la alberca en el techo. Curiosamente, todo esto vincula más a nuestro proyecto con los colores del cielo y del mar”.

¡Busca más novedades y productos en nuestra edición de septiembre!