Aurelio Vázquez: Sobre el Estilo industrial

Publicado en: DecoraciónEntrevistasNoticias | 1 diciembre, 2020

Para abordar un estilo, que pareciera ya estar muy delimitado, y al mismo tiempo encontrar un balance entre la funcionalidad y lo estético, el profesionista tiene que distinguir entre los diferentes estilos del diseño de interiores.

Al respecto y desde tu perspectiva, ¿cuál es el contexto que enmarca lo que llamamos estilo industrial?

Los estilos provienen un poco de la moda y de un entorno sociocultural específico, por lo tanto, no son malos, simplemente hay que saberlos utilizar. Concretamente, el estilo industrial nació en los loft’s y las fábricas de Estados Unidos, cuando las ciudades comenzaron a crecer y, entonces, surgió la necesidad de centralizar el país. La gente de las metrópolis fue reincorporada en la periferia, donde antes eran zonas industriales; por consiguiente, las fábricas comenzaron a transformarse en viviendas y oficinas, generando que hubiera un cambio de estilo.

Básicamente se aprovechaba lo que ya existía, por lo regular, con una visión de bajo costo, es decir que el local ya tenía la estructura metálica medio oxidada, más el ladrillo rojo aparente, más el piso en un firme pulido que hasta está manchado, denotando el paso de la industria por ese lugar; y así, con esas características, el sitio nada más se hacía habitable, por tanto, se obtenía el auténtico y real estilo industrial.

Después siguieron las adaptaciones, que procuraban emular ese espíritu, poniendo algunos de esos elementos en otro lugar, donde no necesariamente era su origen. Considero, expresa el diseñador, que es válido en situaciones comerciales, hotelería y servicios, ya que se puede diseñar un restaurante en estilo industrial, siempre que el menú, el chef y la personalidad del restaurante lo demande. Claro que, eso no es auténtico, pero compone una ambientación muy específica, coherente con el tipo de restaurante y con lo que habrá para comer.

Dentro de una vivienda, es más difícil que eso suceda, de hecho en proyectos residenciales se ve un poco más forzado trasladar un estilo ya estructurado, porque lo que se busca en estos casos, es reflejar la personalidad de las personas que habitan el espacio; por ello, resalta nuestro interiorista invitado: “el estilo no es lo malo; la equivocación está en qué momento usas el estilo”.

Finalmente, pide Aurelio Vázquez: recordemos que “el interiorismo te ayuda a vivir mejor, suena muy ambicioso, pero sí tengo esa creencia”, una filosofía de trabajo que permite gratificarse no por los millones de metros que has desarrollado como interiorista, sino por cuánta vida puedes dar a través de un espacio que tú creaste, es lo increíble.

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