Augusto Quijano: arquitectura dialogada, no impositiva

Publicado en: | 18 octubre, 2018

Paciencia y constancia

CORPORATIVO BACSA (1)

Un hombre de frases concretas y conceptos claros -reconocido internacionalmente porque su obra privilegia los espacios amplios, las formas discretas y un intenso diálogo con el entorno-, Augusto Quijano nos reveló en amena charla, algunos de los secretos que lo han llevado a ser uno de los arquitectos mexicanos con trayectoria más amplia, por no decir impresionante. Nacido en 1955 en Mérida, Yucatán; se trasladó a la Ciudad de México en 1974 para estudiar en la Universidad Iberoamericana. Apenas terminó su carrera, regresó a su tierra natal para trabajar, pues ni bien había puesto un pie de regreso, cuando ya tenía su primer proyecto.

©Martirene Alcantara Photographer

Quizá el primer precepto, la primera idea fundamental de la que parten los fundamentos de la obra de este arquitecto nacido en Mérida, es la comunicación. En su obra existe un diálogo tan intenso entre los materiales, los espacios y las formas, que sólo es posible imaginarlo o abstraerlo en una frase: “ Siempre he dicho que si invito a trabajar a alguien conmigo, es para oír sus ideas, no para imponer las mías ”. Así es su obra, diálogo antes que imposición y la necesidad de escuchar antes de ejecutar. Para él “ nuestro cliente es el clima y los usuarios son el sol, la brisa y otros elementos ”.

INSTITUTO DE BIOTECNOLOGIA UNIVERSIDAD DEL MAYAB (5)

Soluciones sencillas, amistades largas
“ Me gusta trabajar primero que nada con amigos, que tengan el mismo pensamiento acerca de la arquitectura. Me gusta invitarlos en la fase proyectual o arquitectónica. Invito a gente que respeto, me gusta que colaboren conmigo para permitir que sus ideas se concreten, más que imponer las propias ”. Sin embargo, no siempre colabora con gente que conoce: “ El mundo se ha especializado terriblemente. Ahora hay especialistas hasta para la basura y muchas otras acciones del funcionamiento de un edificio. Al final, yo decido quién se adapta más a la filosofía de buscar soluciones sencillas, no complejas. Soluciones sencillas que permiten que las cosas funcionen correctamente y aguanten el paso del tiempo ”.

En otras palabras, no hay que caer en las redes de las falsas amistades: “ Muchas veces, nos vamos con la moda, ya sea la sustentabilidad o no sé qué, pero hay cosas de sentido común, esas son las que más trascienden. Yo creo más en una colaboración de pensamiento e ideas, que es lo que debe hacer la arquitectura para dar con la mejor solución ”.

CASA CORTA (1)

El espíritu de la época
Nacido en 1955 en Mérida, Yucatán; se trasladó a la Ciudad de México en 1974 para estudiar en la Universidad Iberoamericana. Apenas terminó su carrera, regresó a su tierra natal para trabajar, pues ni bien había puesto un pie de regreso, cuando ya tenía su primer proyecto. Desde entonces ha estado trabajando, siempre con un sentido localista: “ Hemos tratado de configurar en la ciudad una cultura arquitectónica que no existía hace 40 años. Hay que entender que la arquitectura se desarrolla desde un sitio para ofrecer a la gente respuestas al medio, al lugar y a condiciones específicas como el clima. Es muy distinta la vida de una región como el sureste mexicano, que en otros sitios, casi industriales, económicamente más activos.

Tenemos otras virtudes, propias de nuestro lugar ”. Una vez más, el diálogo como fundamento: “ Lo más importante es aprender a adaptarse al estilo de vida de la región, y permitir que elementos como el clima o el mismo espacio atraviesen por la obra, la recorran ”.

Casa de Huéspedes. 1998 Merida

“ A lo largo de estos años he tratado de hacer arquitectura que sea del sitio, que parta del lugar y se adapte al modo de vida local ”. Para lograr esto, hay otro secreto: el espíritu de la época. “ No podemos hacer arquitectura que parezca de épocas pasadas. Como hacer algo en 2018 que parezca de 1980: no creo en pretensiones estilísticas del pasado. Hay que reinterpretar los conceptos, no los lugares.

Aunque la arquitectura hecha con cristal y fierros sea fantástica, acá en Mérida los metales se corroen rápido y tal vez el cristal permita demasiado sol donde no queremos. No puedo usar los mismos elementos en Japón, NY o CDMX. Es como si quisiera andar de pants y sudadera todo el día en Mérida, es imposible, aunque en otros lugares así anden los domingos. Nuestra vestimenta, como nuestra arquitectura, está hecha de materiales que permiten trabajar con el calor y nos mantiene frescos ”.

CASA LARGA (2)

Lo importante está adentro
Cuarenta años de experiencia también le han cambiado la visión en otros aspectos igual de importantes: “Empecé haciendo más formas que espacio. Ahora, me enfoco más en el espacio. Lo más importante es encontrar el interior de las obras, no el exterior”. Para comprender un poco más el concepto, nos pone un ejemplo sencillo: “ La arquitectura es como el ser humano: es más importante lo que pensamos, sentimos y somos en el interior que lo que traemos encima. Más allá de camisa, pantalón o lentes, lo importante es quién somos. Hay que trabajar la arquitectura de adentro hacia afuera, no de afuera hacia adentro ”.

Esta norma, sin embargo, aplica no sólo para los arquitectos. “ Desgraciadamente, siempre vemos la arquitectura por fuera. Hay que ingresar a las obras, conocerlas a fondo, entender sus conceptos y las intenciones del arquitecto. No basta una foto de un edificio en una revista: hay que ir, estar ahí, tocarlo y respirarlo por dentro, transitarlo, ver la calidad de luz que tiene. Lo importante es que la gente se sienta bien en los interiores de una obra. Si no, la arquitectura no tendría razón de ser ”.

Rectoria Unimayab

Quizás porque es igual de firme que sus conceptos, el concreto es uno de sus materiales favoritos. “ Es un material del siglo XX, con la virtud de ser muy manejable. Lo he manejado desde el prefabricado más que desde el colado. El concreto que usamos no lleva arena porque acá la arena es de playa, demasiado salina, por lo que se cristaliza y estalla. En vez de arena usamos un polvo fino de piedra, de la misma piedra que tenemos en toda la península ”.

“La arquitectura es como el ser humano: es más importante lo que pensamos, sentimos y somos en el interior que lo que traemos encima. Más allá de camisa, pantalón o lentes, lo importante es quién somos. Hay que trabajar la arquitectura de adentro hacia afuera, no de afuera hacia adentro”.

CASA EN L (3)

Lugar y época “ La zona de Yucatán no es sísmica. Por ello, caben casi todas las posibilidades: puedo trabajar con trabes, vigas, sin grandes conexiones de piezas prefabricadas. Comprobamos que el prefabricado es muy fácil de usar y se ajusta al proyecto en lugar de que el proyecto se ajuste al material. Más que entender el prefabricado como una serie de módulos que uno va usando para armar un proyecto, es como si cada obra prefabricada fuera un sastre que está cortando un traje ”. Así, casi sin querer, nos recuerda una vez más la importancia del entorno: “ La buena arquitectura tiene un valor universal pero está resuelta en un sitio en particular.

Tiene una serie de connotaciones, configuraciones y respuestas de acuerdo con su momento y la época en la que está erigida. La arquitectura siempre tiene que aportar, desde cualquier perspectiva o sitio. No importa el tiempo, ya sea económico, político o social, siempre deben respetarse dos grandes espíritus: el espíritu de la época y el espíritu del lugar ”.

CORPORATIVO DICAS 1

Después de haber escuchado preceptos tan valiosos como los de este experimentado yucateco, le pedimos que nos dé un último concepto, alguna idea final que sea de utilidad para hacer o valorar la arquitectura: “ A la arquitectura hay que quitarle, no ponerle. Hay que quitarle cosas para que se vea bien y no ponerle cosas para que se vea bien. Eso sucede muchas veces con el interiorismo, se excede. Con tal de que vean un interiorismo chévere, le ponen un montón de cosas y entonces se pierde el sentido del espacio. Dónde queda el espacio entonces. Siento que debemos ser más elementales, propositivos, porque hay lugares con demasiado ruido visual ”.

De esta forma terminamos nuestra charla, convencidos de que -ante tanto ruido- habrá que privilegiar el diálogo.

Te invitamos a disfrutar el articulo completo en nuestra edición de octubre.