Arquitectura natural
La arquitectura natural tiene el objetivo de que la gente vuelva a conectarse con la esencia de la naturaleza dentro de los espacios.
Esta corriente tiene sus orígenes en movimientos artísticos pasados, como el movimiento land art, desarrollado a finales de los años 70. A pesar de que el land art tuvo un enfoque más dirigido a un reclamo por la falta de austeridad en las galerías, también logró acentuar el vínculo entre arte y naturaleza.
Es la exploración de lo que significa diseñar con la naturaleza en mente.
En la arquitectura natural se busca ampliar el concepto de land art, más como un activismo que como protesta. Se pretende captar la conexión armoniosa que la humanidad tiene con la naturaleza a través de la arquitectura.
Durante la labor de diseño y construcción, las piezas son simples, humildes y construidas con los materiales más básicos. Los resultados a menudo se asemejan a la arquitectura indígena, que se traduce en el deseo de volver a un mundo menos tecnológico.
Las formas son despojadas hasta su esencia, expresando la belleza natural inherente de los materiales y la ubicación de la actuación. Dicho movimiento se expresa a través de las intervenciones basadas en la localización de las estructuras construidas con materiales vivos.
Se demuestra respeto por la naturaleza.
Las estructuras exponen deliberadamente los materiales naturales utilizados en el proceso de construcción. Se pueden apreciar las ramas, las rocas y todos los materiales. Aquel que lo ve entiende estructuras no van a existir siempre.