ARCO, arquitectura contemporánea: José Lew

Publicado en: EntrevistasNoticias | 8 marzo, 2022

Ha habido muchas cosas que han cambiado desde que ARCO Arquitectura Contemporánea se fundó en mayo de 2000. Pero hay muchas otras que, esencialmente, siguen siendo igual.

En una plática con José Lew, uno de los fundadores de este despacho chilango, nos revela por qué el mejor proyecto, siempre es el proyecto en el que estamos trabajando.

Hoy en día, en ARCO se enfocan más en el desarrollo inmobiliario. En ocasiones también hacen interiores pero su perfil es más de desarrolladora de proyectos de vivienda y oficinas. El tiempo y el trabajo bien reconocido les permite ahora escoger sus proyectos y el equipo con el que trabajan. Aunque, con relación a esto último, José reconoce que no siempre es tarea sencilla: “Seguimos siendo una empresa familiar que cuida mucho su equipo y se esfuerza por contar con gente valiosa, lo que no es fácil ahora. La verdad es que la gente no quiere hacer carrera en una empresa. Lo que quieren es venir, agarrar experiencia dos o tres años y ya, adiós, se van a otra empresa o se van a viajar. Entonces, mantener un equipo es muy difícil”.

“No debemos perder de vista que la arquitectura se vive. La arquitectura no son renders. Hacer un render no es saber proyectar. Nosotros somos desarrolladores, constructores y proyectistas.”

LA RIQUEZA DE LO DIVERSO

Para José Lew, lograr al mismo tiempo el éxito profesional y la satisfacción personal, sí es posible. Asimismo, afirma que pone el mismo ímpetu en cada proyecto. Como si fuera un bebé recién nacido, cada proyecto nuevo consume toda su atención. Y, aunque asegura que su proyecto favorito siempre es el que está realizando en el momento, reconoce que hay muchos factores que hacen que un proyecto sea más memorable que otro. “Hay veinte mil experiencias en las cuales hubo algún problema con el cliente o en el proceso constructivo. Eso puede quitarle un poco el buen sabor de boca a cualquier proyecto”.

Además, en la diversidad está la riqueza. “Tenemos la fortuna de tener una gran variedad de tipologías en las cuales trabajar.  No somos un despacho que sólo haga hospitales u hoteles. Por eso, nuestra profesión nunca es aburrida, cada proyecto es un reto enorme. El año pasado, tuvimos la oportunidad de proyectar un templo para la Comunidad Judía, lo que nunca habíamos hecho. Fue un reto en cuanto a funcionamiento, logística y cosas relacionadas con la religión. Ese proyecto en particular me emocionó mucho y acabó de forma increíble. Aunque sea una casa o un departamento -de los que hemos hecho muchísimos-, igual me emociona”.

¡Busca más novedades y productos en nuestra edición de marzo!