Acabados en las cerraduras

Preocupados por la diversidad de diseños y de gustos, muchos diseñadores, arquitectos, interioristas y fabricantes han enfatizado la variedad de acabados en las cerraduras. Enlistaremos algunos de los más importantes y las características que provocan:

Aluminio: La primera opción es conservar el color natural del aluminio. Puede parecer una opción simple, pero también implica naturalidad y practicidad. Cada uno de los acabados tiene características propias; en este caso el color del aluminio implica una cerradura más sobria.

Blanco: En el caso del color blanco, se provoca un ligero contraste con el color del aluminio. Es buena opción en cerraduras sin manija, ya que permite un ligero resalte en la entrada de la cerradura.

Es muy amplia la variedad de acabados y diseños para que coincida con prácticamente cualquier requisito de la puerta.

Negro: Se suele decir que el negro es elegancia, y también aplica en las cerraduras. Sin embargo, hay que pensar en ese fuerte contraste con el color del aluminio, ya que puede ser demasiado notorio.

Bronce: Otra tendencia es buscar acabados de otros metales, con la intención de simular otro material en la puerta. El bronce es uno de los más llamativos, por su distinción y su brillo peculiar.

Se debe optar por la mano profesional para la instalación de las cerraduras, y de productos con las mejores condiciones de resistencia, calidad y durabilidad. Una vez que se combinen esos factores, ahora sí se puede dar paso a una elección vistosa, que resalte la estética de la cerradura de las puertas.

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